Nuestros caballos pueden
ser foco de enfermedades infecciosas en cualquier momento, y estas se
originan por distintos motivos (virus, hongos, bacterias y/o
protozoarios) siendo las bacterias y los virus los primeros en la lista
de consideraciónes.
Los diversos elementos
virales generalmente crean perturbaciones en el sistemas del equino,
Podemos acercarnos al despistaje a través de los
método de señalización y comunicación avanzada, concientes que el laboratorio siempre tendrá la ultima palabra.
Grupo de patógenos:
Virus de la Influenza equina tipo A (equi1 y equi2).
Herpesvirus equino
EHV-1(Subtipo 1 o cepa fetal causa aborto y parálisis, Subtipo 2 o cepa
respiratoria Rinoneumonitis), EHV-2, EHV-3 (Exantema coital).
Virus de la Arteritis Viral Equina.
Adenovirus.
Virus de la Anemia Infecciosa Equina.
Todos estos agentes
tienen la particularidad de provocar una sinología respiratoria similar
dada por un cuadro febril, decaimiento, rinitis (secreción nasal)
bilateral, tos (seca o productiva según el caso), anorexia, etc.
La contaminación
bacteriana subsecuente será la encargada de provocar las alteraciones
fisiopatologías más serias que van desde secuelas respiratorias crónicas
hasta abortos en yeguas preñadas.
Dentro de este grupo
merece mención especial el virus de la Anemia Infecciosa Equina, el cual
se caracteriza por producir una enfermedad infectocontagiosa sumamente
inmunosupresora, generalmente de curso crónico y que no posee
tratamiento curativo; por lo tanto los animales con reacciones positivas
deben ser sacrificados.
De modo que por lo
expresado anteriormente, las enfermedades virales deben ser tomadas muy
en serio en la producción equina, ya que pueden ocasionar grandes
pérdidas económicas.
Dentro de los agentes bacterianos más comunes encontramos:
Streptococcus equi (Papera o Adenitis equina).
Clostridium tetani (Tétano).
Salmonella thypimorium (Salmonelosis).
PLAN DE VACUNACIÓN:
Vacunaciones obligatorias:
Encefalomielitis equina:
los potrillos 2 dosis con 30 días de intervalo, luego revacunación anual (Septiembre-Octubre).
Influenza equina:
los potrillos a los 3 o 4
meses la primera dosis, luego repetir a las 2 o 6 semanas. Refuerzo
anual. El certificado dura 3 meses.
Anemia infecciosa equina:
realizar la
identificación de los positivos por medio del Test de Coggins cada 6
meses. El certificado tiene una duración de 60 días para animales en
tránsito y de 180 para animales en establecimientos. No permitir el
ingreso al establecimiento de animales que no presenten el test con
fecha máxima de 15 días previos al transporte.
Debemos tener en
cuenta que todo animal positivo a la prueba de inmunodifusión sin
importar el valor económico, raza, etc., deberá ser sacrificado
indefectiblemente.
Vacunaciones optativas:
Tétanos:
Los potrillos 3 dosis
(2, 3 y 6 meses de edad), los animales adultos 1 vez al año, en caso de
yeguas preñadas en el 10° mes de gestación. Todo animal traumatizado,
tener en cuenta la administración de suero antitetánico más una dosis de
toxoide con refuerzo a las 4 semanas.
Adenitis equina:
Los potrillos 2 o 3 dosis a partir del destete (5 o 6 meses). Animales adultos (yeguas y padrillos) dos vacunaciones anuales.
Rinoneumonitis equina:
Yeguas preñadas en el
5°, 7° y 9° mes de gestación (no exceder este límite). Potrillos, 2
dosis con intervalo de 4 semanas y refuerzo a los 6 meses.
Aborto infeccioso equino:
Yeguas preñadas en el 4°, 6° y 8° mes de gestación.
El plan de vacunación para equinos incluye:
Influenza y tétanos:
A los tres meses si la madre no ha sido vacunada o a los seis meses si la madre fue vacunada. Refuerzo al mes.
Influenza, cada seis meses.
Tétanos, cada año.
Encefalitis equina:
Cada año en climas fríos y cada seis meses en climas cálido.
Vacuna contra herpes virus:
Según la presencia de la enfermedad en la zona.
Este plan de
vacunaciones no es rígido, sino por el contrario es un modelo flexible y
adaptable a cualquier harás, centro de training, club hípico, etc., por
el médico veterinario responsable o encargado del mismo; sobre todo
teniendo en cuenta el área geográfica donde se encuentre ubicado dicho
establecimiento.
ENFERMEDADES
INFLUENZA EQUINA
Enfermedad aguda, febril
y muy contagiosa, cuyo principal signo clínico es la tos. Los animales
comienzan con fiebre, temperaturas que oscilan entre 38.5ºC Y 41ºC,
luego aparece una tos seca, persistente e improductiva (seca) y luego se
hace productiva (húmeda). Se puede ver una descarga nasal serosa que si
se complica con agentes secundarios se vuelve purulenta.
El estado febril no debe
pasar los 5 días, en caso contrario se sospecharía de complicaciones.
La tos desaparece a las 3 o 4 semanas, siempre que no se haya complicado
la enfermedad con agentes secundarios. Durante el curso de la
enfermedad no se harán trabajar a los animales afectados y una vez
superada la misma es recomendable establecer un período de por lo menos
10 días de inactividad. Los equinos desarrollan cierta inmunidad a
partir de la infección natural o por medio de la vacunación, aunque
pueden volverse a infectar y diseminar el virus a pesar de solo mostrar
una leve sintomatología.
Como tratamiento se hará
reposo absoluto a todos los afectados hasta una semana después que los
signos hayan desaparecido. Si la fiebre persiste por más de 5 días se
aplicarán antibióticos, antisépticos broncopulmonares, vitamina C y
soluciones electrolíticas balanceadas.
Se deben inmunizar con
vacunas bivalentes a los potrillos a los 6 y 7 meses de edad y todos los
animales deben ser vacunados cada 3 meses, excepto aquellos equinos que
estén realizando trabajos muy intensos ya que después de la vacunación
los animales solo pueden efectuar trabajos livianos por una semana. En
aquellos casos de potrillos nacidos de madres no inmunizadas se
comenzará a vacunar a los 2 meses y aplicar una segunda dosis a los 5
meses.
ADENITIS EQUINA - MOQUILLO – PAPERAS
Es una enfermedad
infectocontagiosa, febril, de curso agudo o sub-agudo que afecta el
tracto respiratorio superior y ganglios adyacentes (retrofaríngeos y
submandibulares). Se presenta principalmente en potrillos menores de 2
años de edad y es causada por Streptococcus equi (bacteria gram +).
Es una enfermedad muy
contagiosa, la principal vía de entrada de la bacteria es por el tracto
respiratorio pero puede también ingresar a través de heridas que tengan
contacto con secreciones purulentas o a partir de leche materna
infectada.
Tiene un período de
incubación de 3 a 8 días y los síntomas son: fiebre, abatimiento,
anorexia. Continúa con una secreción serosa y luego purulenta. Los
ganglios se inflaman, se tornan duros, calientes y dolorosos. Estos a
los pocos días se producen abscesos y se abren hacia el exterior de las
bolsas guturales o la retro faringe. El animal además presenta tos
productiva, disnea y disfagia. El diagnóstico se realiza a partir de los
síntomas, por las lesiones y por laboratorio a partir de muestras de
secreción.
El pronóstico es
favorable siempre que la enfermedad se limite solo al tracto
respiratorio superior, que generalmente curan en 2 o 3 semanas. En caso
de haber complicaciones el pronóstico es reservado y depende que órgano
esté afectado. El tratamiento médico es eficaz, se recomienda el uso de
antibióticos como la penicilina de depósito o sulfa-trimetoprim, pero
nunca una combinación de ambos.
Los abscesos deben
madurar y debe realizarse un drenaje quirúrgico y lavaje con
antisépticos. Los animales afectados deben ser aislados por la alta
contagiosidad de la enfermedad.
Profilaxis: se recomienda el uso de vacunas en potrillos desde muy temprana edad.
ENCEFALOMIELITIS
Enfermedad infecciosa, transmisible y propia de los equinos pero puede afectar a los humanos (zoonosis).
La enfermedad es
provocada por un virus de la familia Togaviridae, género Alphavirus y
dentro de este hay 3 tipos de virus: virus de la Encefalomielitis equina
del Este (EEE), Encefalomielitis del Oeste (EEO) y Encefalitis
Venezolana (EEV). En nuestro país está difundido el virus del Oeste.
La transmisión de la
enfermedad se realiza por medio de insectos hematófagos como el mosquito
Culex, Aedes, etc. a partir de las aves que son reservorio natural de
la enfermedad y que propagan la misma por distintas zonas a través de
sus migraciones (ej: golondrinas).
La sintomatología
comienza con fiebre, anorexia y depresión, luego de esta etapa comienzan
los signos nerviosos que al principio son incoordinación,
hipersensibilidad al ruido y al tacto, somnolencia, temblor en músculos
faciales, etc.
Posteriormente llega la
fase de parálisis con caída del animal e imposibilidad de levantarse o
mantener la estabilidad. Por último puede sobrevenir la muerte.
Como tratamiento se
realiza uno médico (con la finalidad de combatir la inflamación del
sistema nervioso), suero hiperinmune y se realizan cuidados del animal
para evitar complicaciones durante el decúbito (tranquilidad, limpieza
del box, buena alimentación, etc.).
Para la prevención de la
enfermedad se usan vacunas bivalentes (EEE Y EEO) que son obligatorias y
se aplican en Primavera (Sep. a Nov.). La sospecha o aparición de la
enfermedad debe ser denunciada a lo autoridad sanitaria correspondiente.
ANEMIA INFECCIOSA EQUINA
Enfermedad infecciosa,
transmisible y propia de los équidos. La enfermedad es provocada por un
virus de la familia Retroviridae, se caracteriza por una evolución
crónica con períodos de agudización con fiebre, abatimiento, anemia y
edemas. La transmisión de la enfermedad se realiza por medio de
picaduras producidas por artrópodos hematófagos (Tabanus, Stomoxys,
Aedes y Anopheles) o por agujas (la transmisión es siempre mecánica).
La enfermedad se puede
presentar de distintas formas, desde una sobreaguda, donde la enfermedad
se desarrolla súbitamente y culmina con la muerte del animal, hasta una
forma inaparente que como su nombre lo dice no presenta síntomas. La
sintomatología típica de Anemia Infecciosa Equina es fiebre, anemia,
edemas enflaquecimiento, etc. También aparecen síndromes específicos
según sea el órgano afectado (Síndrome hepato-renal, Síndrome
intestinal, etc.).
En las formas crónicas
aparecen períodos de agudización de la enfermedad y termina con la
muerte luego de mucho tiempo de evolución. El diagnóstico médico es
difícil ya que los síntomas de la enfermedad no son muy específicos; el
Test de Coggins es el método de laboratorio de elección para identificar
animales infectados en cualquier período de la enfermedad (salvo
durante el período de incubación, primeros 20 días).
No hay tratamiento para
esta enfermedad, sólo la profilaxis que consta de control periódico por
medio del Test de Coggins, aislamiento y eliminación de los animales
positivos, control de vectores así como la utilización de material
descartable y por último estricto control de los animales que entran o
salen del establecimiento. Todos los animales positivos deberán ser
denunciados ante la autoridad correspondiente.
TETANOS
Enfermedad aguda causada
por la toxina de Clostridium tetanis (tetanopasmina). La enfermedad se
caracteriza por espasmos tónicos intermitentes en músculos voluntarios.
Las esporas son viables
durante años en el suelo, y el mecanismo de la infección es igual al que
se produce en humanos. La penetración por heridas, y una incubación de 2
a 50 días (generalmente de 5 a 10 días), y la tetanopasmina producida
bloquea el transmisor inhibidor, lo que produce los espasmos
generalizados.
Los animales doblan su espina dorsal hacia atrás hasta 45º, y sufren de terribles convulsiones.
La tetraciclina y la
penicilina son medianamente eficaces en el tratamiento, aunque por lo
general termina en la muerte de los animales. Se aplica suero
antitetánico.
RINONEUMONITIS
Es una enfermedad
infecciosa contagiosa, febril, que provoca cuadros respiratorios en
potrillos y abortos en yeguas. Es provocada por herpervirus equino tipo
1, y se transmite a partir del aparato respiratorio y digestivos por
estar en contacto con objetos contaminados o fetos abortados.
Los síntomas en los
potrillos son de fiebre, conjuntivitis, rinitis, tos y malestar general,
en las yeguas es raro que presenten signos clínicos, provoca abortos a
las 3 o 4 semanas de adquirir la enfermedad y generalmente son a partir
del quinto mes de gestación.
El diagnóstico se
realiza por los síntomas, por las características del los fetos
abortados y la combinación de signos respiratorios y reproductivos, se
confirma con resultado de laboratorio. El pronóstico es favorable y
generalmente no quedan secuelas de la enfermedad.
Tratamiento apunta a
impedir la complicación de las lesiones producidas por el virus con
bacterias, para lo cual se aplican antibióticos.
Profilaxis:
Se usan vacunas en
potrillos y en yeguas preñadas. Los animales afectados deben ser
aislados del resto ya que es una enfermedad muy contagiosa.